EL ARTE DE NACER
El cordón umbilical es un tubo que une el feto a su placenta. Contiene arterias principales y venas (las arterias umbilicales y vena umbilical) que facilitan el transporte de nutrientes y oxígeno, entre el embrión y la placenta. Cuando el bebe nace, el cordón umbilical se corta y se deja sólo una pequeña cicatriz( el ombligo del recién nacido). En las personas tiene aproximadamente una longitud de 50cm y un diámetro de 2cm. Contiene dos arterias umbilicales y una vena umbilical, sepultada dentro de la gelatina de Wharton, que se pueden utilizar para el trasplante de médula destruida al tratar la leucemia. Con el paso de los años se ha estudiado las funciones de la placenta y del cordón umbilical, con el propósito de encontrar respuestas a varias interrogantes de la vida intrauterina y el tratamiento de enfermedades del feto; el cual ha sido el primer paso de la terapia fetal. En los últimos años el cordón umbilical nos ha dado mayores sorpresas, en esta última década, se ha descubierto que la sangre del cordón umbilical es una fuente fácilmente disponible de células madre capaces de ser almacenadas por métodos científicos durante unos 10 años sin perder su capacidad de pluripotencialidad. Esta capacidad permite a las células convertir su estructura celular inespecífica en células específicas de algún tejido mediante activación biológica lo que se ha venido a denominar células madre. Las células madre son células que podrían ser la solución curativa de varias enfermedades como: la diabetes, la cirrosis hepática, insuficiencia renal, infarto del corazón, etc. Estas células aisladas de la sangre del cordón umbilical y almacenadas en bancos especializados, estarán en un futuro próximo en la primera línea del tratamiento de enfermedades. El cordón umbilical se dona a hospitales públicos. En España el almacenamiento de los mismos se lleva a cabo en los seis bancos públicos homologados de cordón umbilical. Mas tarde, se usa para realizar trasplantes de células madres adultas obtenidas de la sangre del cordón umbilical, una alternativa más eficaz al tradicional trasplante de médula osea, ya que disminuye la probabilidad de rechazo y mejora el resultado terapeútico. La donación es posible realizarla con un periodo máximo de tres días después de dar a luz. El médico pincha un vaso del cordón del recién nacido con una aguja y se aspira entre 90 y 150 ml de sangre. Esta muestra se envía lo antes posible al banco asociado con la maternidad (en caso de donación pública) o al que deseen los padres. Una vez allí, se extraerán las células madre y se congelarán progresivamente hasta finalmente almacenarlas en un tanque de nitrógeno a una temperatura de 200 grados bajo cero . (Foto: National Geographic)
2 comentarios
Marlene -
Consue -